Los primeros rebaños de este ganado llegaron desde España. Ya en el siglo VIII los criadores de nuestro país habían comenzado a seleccionar las mejores ovejas para obtener fibras de lana más finas, con tanto éxito que se prohibió su exportación bajo pena de muerte. Sólo en 1765 se regalaron unas cuantas al Elector de Sajonia, y poco después la raza se extendió por Europa. El capitán John Macarthur llevó las primeras 30 ovejas merino a Australia en 1789, con la segunda flota de convictos americanos. Unos años más tarde recibió su primera donación de terreno junto a Sidney y las ovejas se multiplicaron a gran velocidad. En 1792 ya contaba con 300. En 1800 el número de ovejas merino en Australia llegó a 6.000 ejemplares, una cifra insignificante si consideramos los 72,6 millones que se contabilizaron en 2015.
jueves, 1 de febrero de 2018
LANA DE OVEJA MERINA HOY
http://www.expansion.com/fueradeserie/moda-y-caprichos/2017/05/16/5914396146163f2a798b4581.html
Los primeros rebaños de este ganado llegaron desde España. Ya en el siglo VIII los criadores de nuestro país habían comenzado a seleccionar las mejores ovejas para obtener fibras de lana más finas, con tanto éxito que se prohibió su exportación bajo pena de muerte. Sólo en 1765 se regalaron unas cuantas al Elector de Sajonia, y poco después la raza se extendió por Europa. El capitán John Macarthur llevó las primeras 30 ovejas merino a Australia en 1789, con la segunda flota de convictos americanos. Unos años más tarde recibió su primera donación de terreno junto a Sidney y las ovejas se multiplicaron a gran velocidad. En 1792 ya contaba con 300. En 1800 el número de ovejas merino en Australia llegó a 6.000 ejemplares, una cifra insignificante si consideramos los 72,6 millones que se contabilizaron en 2015.
Los primeros rebaños de este ganado llegaron desde España. Ya en el siglo VIII los criadores de nuestro país habían comenzado a seleccionar las mejores ovejas para obtener fibras de lana más finas, con tanto éxito que se prohibió su exportación bajo pena de muerte. Sólo en 1765 se regalaron unas cuantas al Elector de Sajonia, y poco después la raza se extendió por Europa. El capitán John Macarthur llevó las primeras 30 ovejas merino a Australia en 1789, con la segunda flota de convictos americanos. Unos años más tarde recibió su primera donación de terreno junto a Sidney y las ovejas se multiplicaron a gran velocidad. En 1792 ya contaba con 300. En 1800 el número de ovejas merino en Australia llegó a 6.000 ejemplares, una cifra insignificante si consideramos los 72,6 millones que se contabilizaron en 2015.